La ex directora de Medio Natural de la Generalitat y exdiputada de ICV en el Congreso, Nuria Buenaventura, declaró el pasado 15 de abril ante el Juzgado de Instrucción número 10 de Barcelona, a petición de la magistrada Miriam de Rosa Palacio.
Buenaventura está imputada por un delito de prevaricación por conceder, presuntamente de manera ilegal, 3.374 licencias para la caza de pájaros fringílidos con pegamento en 2009 mientras era directora de Medio Natural del gobierno de la Generalitat. Las licencias se concedieron tras recibir una queja de un grupo de cazadores que solicitaban la concesión de las mismas.
Dicha forma de caza consiste en aplicar una sustancia adherente en los árboles que inmoviliza a las aves. La ex diputada de ICV, que ha reconocido haber concedido las licencias, considera que la legislación europea permite hacer excepciones en las prohibiciones de caza si es para fines de investigación y educativos, como, en su opinión, ocurrió en este caso. Buenaventura también indicó al juez que las licencias se otorgaron de forma «acotada a cazadores con experiencia, con restricciones de caza y con la supervisión de los agentes forestales». La resolución dictada permitía la captura excepcional de animales machos de cuatro especies: jilgueros, verderones, pinzones y pardillos.
La Fiscalía de Cataluña fue la que inició la investigación pero una vez terminada, el fiscal se vio obligado a remitir el caso a la Fiscalía del Tribunal Supremo en septiembre de 2011 por la condición de diputada de Buenaventura, que sustituyó a Joan Herrera en el Congreso. El caso volvió a los Juzgados de Barcelona cuando dejó su escaño.
Núria Buenaventura forma parte actualmente del núcleo coordinador y de la ejecutiva nacional de ICV, siendo además la coordinadora de programas de este partido.
Nota: Desde el Centro Legal para la Defensa de los Animales no entramos a valorar en el momento actual si la concesión de las citadas licenciadas se realizó de manera legal o ilegal, puesto que no hemos tenido acceso al expediente judicial. Pero consideramos que esa cuestión resulta moralmente irrelevante. La concesión de licencias de caza es inaceptable, con independencia de si dicha concesión se realiza de manera legal o ilegal.
En cualquier caso, no debe resultar sorprendente que la imputada, ex diputada de ICV, haya concedido las citadas licencias para cazar animales. Ella forma partido de un partido ecosocialista que defiende la caza, posicionamiento que es habitual entre las organizaciones ecologistas.
Si bien una parte de la sociedad confunde a dos movimientos muy distintos, como son el movimiento por la defensa de los animales y el ecologismo, lo cierto es que quienes defendemos a los animales tenemos en cuenta a todos y cada uno de los animales, con independencia de la especie a la que pertenecen. Ello nos diferencia del movimiento ecologista, que defiende a los animales en la medida en que forman parte de un determinado ecosistema o de una especie con pocos individuos.